HOY Inauguramos WHITE / OPEN / NOT CLOSED en Doctor Fourquet, 3 (Madrid)

WHITE / OPEN / NOT CLOSED

 

Fechas: 28 de septiembre - 07 de octubre de 2017

Inauguración: 28 de septiembre 19:00 h

Lugar: ABIERTO THEREDOOM. Calle Doctor Fourquet, 3, Madrid

www.ddrartgallery.com

 

Artistas Participantes: DDR Art Gallery / David Heras Verde, Annita Klimt, Roberto López Martín, Evangelina Esparza, José A. Vallejo, Raúl Casassola y David Delgado Ruiz

Comisariado: Sara Zambrana & DDR ART GALLERY

 

Blanco: «el comienzo / el cimiento / la simiente / latente / la palabra en la punta de la lengua / inaudita / inaudible / impar / grávida / nula / sin edad / la enterrada con los ojos abiertos / inocente / promiscua / la palabra / sin nombre / sin habla». Si bien estos versos escritos por Octavio Paz en 1966 no guardan ninguna relación directa con lo que van a ver y experimentar, también es cierto que condensan la particularidad de esta exposición: una suerte de laboratorio de ambiciosas ideas en el que se repiensa en colectivo el blanco, o mejor, los blancos, sus matices, sus simbologías y mitos, todos aquellos conceptos que pueda generar. Aquí, queremos que se acerque al comienzo, a la hoja en blanco, al espacio sin centro, a la libertad y a la luz, a la invitación a ser y, por supuesto, a la nada, de donde ha de nacer todo.

Abierto / No Cerrado: inspiración formal y funcional; DDR Art Gallery, galería online de arte contemporáneo, siempre está abierta. Esta es una exposición para todos y todas, para descubrir y para disfrutar. Es un lugar para que los ojos se despojen y se precipiten, se despidan de sus compromisos o convencionalismos y se dejen llevar por el camino que el arte les promete. Ese arte que insiste, que pregunta y pregunta y, a veces, responde, como las piezas de Annita Klimt, donde la sutileza se engalana y se poetiza, y donde toda historia puede comenzar, como cada uno desee, con pocas palabras, con la palabra acertada, con un recorte que insiste y una imagen que reclama la herencia del cine clásico francés. Algo más que ensoñaciones. Algo más que compartir pensamientos. También este carácter poético aparece en la obra de Evangelina Esparza, en las emociones que esconde en el mobiliario, en el cajón de la mesilla de noche, donde guardamos muchas veces aquello más íntimo, lo que nos hace vulnerables, quizá, algo tan propio del blanco y de la luz como es la pureza o la inocencia, la memoria de lo ya vivido.

 

 

Pero la poesía es libre y el arte no deja de intentar serlo, de ahí que se transforme en la imponente obra de David Heras Verde, reflejos de un ir y venir, de una transitoriedad y no de un destino, donde se cumple la máxima duchampiana: «No merece la pena un cuadro que no cause impacto».

 

 

Tampoco merece la pena obsesionarse si no lo asumes, lo manoseas y, en el mejor de los casos, lo transformas de forma brillante como hace Jose A. Vallejo.

 

Sus muñecos, coloridos y apasionados en sus juegos, siempre tienen nuevas narraciones que contarnos, nuevas posturas y accesorios, parece que no se desgastan, que nunca descansan, porque en realidad somos todos nosotros jugando a la vida. También de juegos nos habla Roberto López Martín con sus avatares, Homo videns: juguetes trastocados por la lógica esquizofrénica que nos guía y absorbe, donde importa más la pantalla, lo virtual, la soledad, que el amigo, la bici –real– o la imaginación.

 

Como sentenció McLuhan «el medio es el mensaje». Todos queremos escapar muchas veces de esa lógica asfixiante, de nuestra pequeña realidad y buscamos asilo en la ficción, como ejemplifica el trabajo de David Delgado Ruiz que, desde su reconocida fotografía documental, nos invita a su realidad ficticia, inventada a base de verdades, y nos lleva a su terreno, inquietante, inspirador, pero sin saber realmente dónde estamos transitando, en una descontextualización del tiempo y el espacio, una deconstrucción de la realidad que observamos, ¿Recorremos una utopía o una distopía? Nuestra mirada es la ventana desde la que miramos el tiempo, nuestras emociones las que interpretan esa realidad.

 

 

Queda por descubrir a Raúl Casassola, reconocido artista vinculado al arte urbano que presenta un trabajo bello y sensible: retratos en los que la precisión, el buen encuadre o el justo sombreado, se ven finalmente vencidos por las expresiones de los rostros de los protagonistas, por las manchas de pintura, los ensayos del dibujante o el soporte visto, espacios donde la materia se hace carne.

 

 

Su obra está abierta, con apariencia intencionada de “a medio hacer” –o no–, con sus latigazos de blancos; en suma y, como ocurre con el resto de piezas, esta exposición está totalmente abierta, para reunirnos, y en blanco, para que todos aportemos nuestras visiones y lecturas propias.

 

                                                                                                        www.ddrartgallery.com